Reducir las infecciones quirúrgicas y mejorar el trabajo en equipo y la comunicación, son factores cruciales cuando se mejora la seguridad del paciente.
A pesar de los muchos avances en cirugía, aún hay mucho trabajo que hacer en la mejora de la seguridad del paciente y del profesional sanitario durante las operaciones, y durante el pre- y el post-operatorio.
Las mejoras sólo puede implementarse cuando las causas - en particular las relativas errores humanos - son habladas y discutidasde manera transparente. Para aumentar la seguridad de los pacientes intervenidos quirúrgicamente, es importanteafrontar estos temas tabú e implementar acciones para reducir la infección quirúrgica, mejorar el trabajo en equipo y la comunicación.
El quirófano es un lugar estresante para trabajar y los equipos tienen que depender unos de otros para mantener los estándares de higiene. El personal sanitario, durante la estancia del paciente, está bajo la presión del tiempo y de los costes. Debemos tenerse esto en cuenta a la hora de elaborar planes de mejora para la seguridad del paciente.
También se deben tener en cuenta las complejidades de la atención clínica: tecnologías sofisticadas, excelentes para el fin previsto, pero imposibles de vincular con otros sistemas, o la amplia gama de materialese instrumental que es necesario gestionar en cada intervención.
Factores clave en la gestión del cambio:
Trabajo en equipo
Actualmente, aparte de una evaluación rápida de las necesidades relacionadas con un procedimiento quirúrgico particular, los médicos y el personal peri-operatorio disponen de pocas oportunidades de pasar tiempo con los pacientes. Esta falta de contacto, puede provocar un mayor riesgo en la identificación errónea del paciente, falta de comunicación del procedimiento o falta de registro de información importante.
Administración y organización
Los procedimientos quirúrgicos necesitan de una considerable planificación y coordinación, lo que significa que diversos cirujanos y enfermeras deben trabajar juntos – no solo en compartir información del paciente, sino también en integrar su trabajo en el pre-durante-post operatorio.
Aparte del número de personas involucradas, existe una gran diversidad de equipamiento, instrumental, medicación, derivados sanguíneos y suministros que necesitan ser preparados y planificados a la vez y en el mismo lugar. Habitualmente, diferentes departamentos o grupos de trabajo gestiona cada tipo de material (p.e. aprovisionamiento, esterilización, traslado de pacientes, farmacia, banco de sangre, etc.). Cuando más personas involucradas más margen para el error.
Además, el personal quirúrgico debe también integrar su trabajo con muchos otros departamentos, como unidades de recuperación, radiología, laboratorio, emergencias, unidades críticas entre otras.
Desde 2008, la OMS ha estado promocionando la ‘Lista de Verificación de la Seguridad Quirúrgica’ para la mejora de la seguridad del paciente. Fue desarrollada después de largas consultas con los profesionales médicos y su intención es disminuir errores y eventos adversos, así como incrementar el trabajo en equipo y la comunicación en quirófano. A pesar de la evidencia que prueba que esto ha reducido significativamente la morbilidad y la mortalidad en quirófano, ésta lista de verificación ya es usada por un largo número de profesionales en todo el mundo. Desde la OMS se anima a cada país a adaptarla a sus necesidades específicas para asegurar su uso más óptimo.
Tecnología
Hay un auge en la importancia del uso de la tecnología en la sanidad, y sus distintas aproximaciones de software, diseño y estándares están disponibles. Pero a menudo, los esfuerzos de modernización de la tecnología en los sistemas nacionales de salud han fallado en reconocer las necesidades peri-operatorias, tanto en la visión como en las prioridades.
Si se focalizan en retos específicos del entorno peri-operativos, estos pueden funcionar como auténticos catalizadores de la transformación del proceso quirúrgico. Los estándares sanitarios deben revisarse para asegurar un soporte total a los requerimientos peri-operativos.
Productos
Trabajar con soluciones y productos más efectivos y más sencillos también puede jugar un rol vital en el incremento de la seguridad del paciente, ofreciendo una visión holística del cuidado, facilitando y acortando tiempos y esfuerzos de tratamiento o siendo intuitivos en su uso.
Recomendaciones para mejorar la seguridad del paciente
- Fomentar una cultura de la seguridad en los quirófanos y otras áreas peri-operatorias.
- La introducción de protocolos concisos en los que los miembros del equipo se presenten con el nombre de pila, discutan el proceso, realicen preguntas y tengan la oportunidad de hablar posibles complicaciones.
- Suficientes pausas para los equipos quirúrgicos.
- Adherencia a prácticas y estándares basados en la evidencia para la prevención de infecciones.
- Compromiso en seguir guías que fortalezcan rutinas.
- Haciendo que el rendimiento sea transparente en medidas clave.
- Mejorando las transiciones del cuidado desde el quirófano hasta las unidades de cuidados a través de un proceso estructurado que ayude a los equipos a poder intercambiar información vital sobre el paciente.
- Usar la simulación como elemento de mejora del trabajo en equipo entre cuidadores, así como en la práctica de nuevos procedimientos.